"Vemos con preocupación cómo aumenta el uso irracional de medicamentos", resaltó Lucila Unías, docente de la cátedra de Farmacología de la Facultad de Medicina de la UNT e integrante del Grupo Argentino para el uso Racional del Medicamento (Gapurmed). "La gente desconoce qué patología tiene, si el remedio elegido es el más adecuado y tampoco sabe cuántos días debe tomarlo ni en qué dosis. El costo de la automedicación tiene más perjuicios que beneficios", explicó.
Unías señaló que es grave el uso indebido de remedios, en especial de aquellos que se expenden con la prescripción de un médico. Según dijo, aumentó la cantidad de recetas que no fueron razonadas correctamente por los profesionales. "A veces sobra lugar en el recetario y les dan lo que el paciente pide", sostuvo. A esto se suma la automedicación, que avanzó de la mano de la venta de los genéricos. La situación es tan grave que, según indicó, hoy se habla de "patología farmacológica". "Asistimos a la cultura de la medicalización de la vida cotidiana", señaló. Para ejemplificar precisó que en el mercado hay 14.000 productos farmacéuticos, cuando la OMS asegura que con 300 remedios esenciales se puede cubrir el 98% de las patologías prevalentes. Hay muchos más de los que hacen falta y eso sin dudas influye en la duplicación del consumo de fármacos que hubo en los últimos años.